Desde los tiempos de Flavio Josefo hasta la actualidad han corrido ríos de tinta acerca de las historias de los reyes del Antiguo Israel. Sin embargo, el descubrimiento de los manuscritos de Qumrán y el desarrollo de la arqueología supuso que en el pasado siglo XX se realizarán avances considerables respecto al conocimiento de estos monarcas. Durante el siglo XXI, la proliferación de nuevas tendencias y marcos de interpretación en el ámbito de las Humanidades ha hecho que el estudio de diversas áreas haya experimentado cambios conforme a la manera en la que estas nuevas perspectivas se han aproximado a cada uno de ellos. Tal es el caso, respecto a la historia del Antiguo Israel, de los estudios de género.

Por todo ello se aprecia la necesidad de realizar un curso que aborde el análisis los principales reyes del Antiguo Israel, aquellos que cuyo reinado marcó importantes cambios durante la existencia de la monarquía y de los cuales tenemos informaciones contradictorias. ¿Existieron Saúl, David y Salomón? ¿Por qué, de confirmarse su existencia, el contenido de sus relatos no tiene las mismas características que las del resto de monarcas? ¿Por qué es Omrí el primer rey del Antiguo Israel mencionado directamente en una fuente extrabíblica? ¿Por qué Ajab se casó con una monarca fenicia? ¿Fue Jehú un gobernante que acabó con la vida de los reyes de Israel y Judá por mandato de Eliseo o porque fue, según la estela de Tel Dan, vasallo del rey de Aram-Damasco? ¿Por qué Atalía, la única gobernante mujer de los reinos de Israel y Judá, no tiene fórmula ni años de reinado asignados a su gobierno? ¿Es por el hecho de ser una mujer? ¿Había alguna limitación de las mujeres al trono? ¿Por qué Josías realizó la reforma deuteronomista y por qué, gobernando varios años, no hubo un asentamiento de la misma tras sus sucesores?

Todas estas incógnitas serán respondidas a lo largo de este curso, en el cual determinaremos además los aspectos históricos y literarios de cada uno de estos reyes y responderemos una incógnita que comparten todos ellos y el resto de monarcas del Antiguo Israel: ¿Por qué no tenemos ninguna de sus tumbas?